Esquema de funcionamiento
Los ascensores eléctricos incorporan un contrapeso. Cuando el elevador baja relativamente lleno (pesando más que el contrapeso), o bien sube relativamente vacío (con menos peso que el contrapeso), el motor que mueve el ascensor actúa como generador.
El sistema recuperador de energía para ascensores transforma esta energía de forma eficiente para almacenarla en un módulo. Este dispositivo además de ahorrar energía disminuyendo de forma drástica las intensidades de arranque del motor, devuelve energía a la red en los estados favorables de carga, es decir, cuando el ascensor baja con más de media carga de su capacidad nominal o cuando sube con menos de media carga de su capacidad nominal.
Esta energía, que de otra forma se perdería en forma de calor disipado en el cuarto de máquinas o en el interior del hueco, en caso de carecer de aquel, puede ser utilizada por otros ascensores o sistemas del edificio.
Según especificaciones de los fabricantes, con la incorporación de este sistema recuperador de energía es posible ahorrar hasta un 25% de la energía que consume la tracción del ascensor respecto al mismo ascensor con un variador de frecuencia convencional.
Los ascensores de comunidades de propietarios que presentan una antigüedad significativa, además de no cumplir con la normativa de accesibilidad actual, pueden tener unos consumos de energía considerables, ya que los engranajes de sus motores poseen numerosas partes móviles, lo que supone mayores pérdidas de energía debido al rozamiento y, por tanto, un mayor consumo.
La sustitución de los ascensores por unos de última generación que cumplan con los criterios de accesibilidad establecidos en el DB-SUA 9 del Codigo Tecnico de Edificación, es del 30% respecto a un ascensor eléctrico convencional con frecuencia y tensión variables.
Existen en el mercado sistemas que consisten en máquinas sin engranajes y de imanes permanentes que incorporan un control de movimiento regenerativo con recuperación de energía en frenada aumentando la eficiencia energética del ascensor.
Las poleas de las cintas empleadas son planas y no ranuradas como las de los cables, con lo que se evita el efecto cuña de desgaste entre cable y polea y se incrementa la durabilidad de ambos componentes.
Por otra parte, como los hilos de acero quedan protegidos por el poliuretano, ya no es necesario lubricarlos, mejorando su adherencia y tracción. La máquina está dotada de rodamientos sellados, por lo que tampoco precisan ser lubricados. Esto supone una reducción en la generación de residuos contaminantes.